Por: Licda. Ireni A. Sierra Pérez.
La justicia, la
sensibilidad, la humanidad, son términos muy difíciles de definir en sociedades
como la nuestra dirigida por déspotas indolentes.
A pesar de las promociones
del presente gobierno de que ha eliminado la pobreza en forma significativa; más
la realidad es otra, lo que entiendo es que se aumento el tesoro de los más
poderosos los que están en la cúspide del poder.
Para muestra un
botón.
Al finalizar este
periodo de 16 años de gobierno vemos como arrasan con todo lo que queda como si
se tratara de un pastel que se han comido un grupito a lo largo de este tiempo
de gobierno, solo queda uno poquito y deben comérselo antes de irse.
Fueron construidos una gran cantidad de
apartamentos para ser repartido a personas de escasos recursos, a aquellos que
están en zonas vulnerables en peligro de muerte.
Pero la ambición y la
falta de humanidad no es primordial en estas personas, son como perros hambrientos;
los cuales terminan con toda esperanza de los que menos tienen.
Este reparto de
apartamento en diferentes zonas y provincias del país se distribuyeron no
tomando en cuenta las necesidades de los más desposeídos.
Estos fueron
entregados a los dirigentes del partido, chóferes secretarias, y otras personas
que a lo largo de este periodo presidencial fueron beneficiarios con pagos de
salarios; hoy los premian con apartamentos que habían sido designado a los más
pobres del país.
Que impotencia que
indignación siento al ver tanta injusticia de hombres sin temor de Dios, sin
amor al prójimo explotadores, arrogantes.
Mi petición a las
nuevas autoridades que tomaran posesión el próximo 16 agosto es que hagan
revisiones de estas entregas; pido justicia; aunque sé que justicia no es un término
que usan mucho esta generación malvada, pero se debe intentar por amor a esta
nación.
¿Dónde está la
solidaridad mostrada en campaña electoral por las autoridades salientes?
Cuanto amor en medio
de la pandemia por la pobre caramba ha quedado evidenciado que solo el bien
individual les interesa, solo la ambición grupal.
La equidad debe
reinar en mi nación; luchemos por esto aún hay esperanza.
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